La medicina antienvejecimiento que realizamos en Clínica Ridaura se caracteriza por ser una medicina Funcional, ya que nos preocupan todas las funciones del cuerpo, preventiva, porque siempre que esté a nuestro alcance actuamos antes de manifestar la enfermedad, e integrativa, puesto que se combinan varias terapias
La medicina integrativa engloba la medicina convencional y la medicina natural, para poner a disposición del paciente todos los instrumentos posibles para su curación.
Al combinar los tratamientos convencionales con alternativas terapéuticas complementarias, potencia los resultados de forma extraordinaria
Este tipo de medicina está orientada a la restitución de la salud por lo que atiende los aspectos globales del individuo; fisiológico, psicológicos, nutricionales y sociales. Es decir, atiende a la persona como un todo y realiza un análisis global de las causas que originan una determinada dolencia.
En Clínica Ridaura no tratamos únicamente los síntomas de la patología, sino que estudiamos todas las posibles causas de ésta. Realizamos una evaluación exhaustiva del paciente y posteriormente, diseñamos un tratamiento personalizado, escogiendo en cada momento los recursos menos agresivos.
Desde enfoques estrictamente científicos, son muchas las causas o factores que se conocen que aceleran el envejecimiento y favorecen enfermedades degenerativas, tales como la genética, deterioro hormonal, acumulación de toxinas, estrés oxidativo, estilo de vida, alimentación, etc.
Estudiando los factores biológicos del envejecimiento podemos intervenir sobre ellos, consiguiendo una mayor longevidad y una mejor calidad de vida ante el paso de los años.
El paciente debe saber que la enfermedad, en muchas ocasiones, aparece como consecuencia de malos hábitos alimentarios y de conducta. La nutrición ejerce un papel fundamental ya que produce mejoras en los pacientes adecuándoles un programa nutricional individualizado y ajustado a su enfermedad
En Clínica Ridaura, la suplementación juega un papel fundamental en el tratamiento a seguir, siempre en función de los análisis realizados al paciente.
Los suplementos, nos aportan esos nutrientes que nuestro cuerpo no consume en las cantidades necesarias y son tan importantes para nuestra salud. Nos permiten utilizar principios activos naturales a concentraciones terapéuticas, y así reducir o evitar otro tipo de medicación que pueda dañar a nuestro organismo.
La medicina integrativa es cada vez más la medicina del presente, y sin duda será la medicina del futuro. No se centra en la enfermedad en sí, sino en el paciente como individuo. Cada paciente es distinto del otro por lo que no siempre se aplican los mismos protocolos ante un mismo proceso patológico.
La medicina integrativa va a la raíz del problema y no únicamente a paliar los síntomas de la enfermedad.
Hay que dejar claro que con la medicina integrativa no se renuncia a la medicina convencional. No se trata de una medicina sustitutiva, si no que se añade a los conocimientos de la medicina clásica, para complementarla, siempre que la patología del paciente lo permita.
Con el fin de ayudar de una forma más completa al paciente se utiliza una combinación de lo que más nos interese de las dos medicinas según el caso
La medicina integrativa nace por una necesidad social. Cada vez vivimos más años por lo que la cronicidad de ciertas patologías en pacientes longevos aumenta de forma exponencial. Por ello, necesitamos tratamientos complementarios para reducir los efectos secundarios de algunos medicamentos y mejorar la calidad de vida de estas personas.
